Vilsa Grupo Inmobiliario, la cadena inmobiliaria con una metodología pionera, acaba de iniciar su proyecto de crecimiento nacional a través del sistema de franquicias. La enseña madrileña emprende esta iniciativa con el respaldo de 20 años en el mercado y un modelo de negocio rentable testado por sus tres oficinas en Madrid. El ambicioso plan de crecimiento establecido para los próximos cinco años conlleva la apertura de 90 oficinas en todo el territorio nacional.
Para afrontar este crecimiento, la enseña cuenta con un equipo de profesionales altamente cualificados y con una amplia trayectoria en el sector inmobiliario. El equipo estará enfocado en apoyar y transmitir todos los conocimientos a la red de agencias franquiciadas. Para ello la enseña tiene como prioridad, brindar un trato cercano, directo y personalizado al franquiciado acompañándolo desde el primer momento para asegurar el éxito en la gestión de la agencia.
La filosofía de trabajo de la compañía se basa en estar a la vanguardia la innovación. Para ello ha establecido un sistema de gestión basado en la aplicación de las últimas tecnologías así como la utilización de medios y herramientas online, para conseguir la mejor interacción directa con los clientes. Desde que comenzó su actividad Vilsa Grupo Inmobiliario se ha caracterizado por ofrecer un servicio integral de compra-venta y alquiler de inmuebles basado en una metodología propia y pionera que ha garantizado la excelencia en las más de 15.000 operaciones cerradas.
Esta trayectoria ha permitido a la compañía alcanzar un elevado grado de experiencia y posicionamiento que ha impulsado a los directivos de la empresa a expandirse hacia nuevas zonas.
La enseña apuesta por la expansión de su red en un momento de recuperación del sector inmobiliario y con tendencias de crecimiento al alza.
Para formar parte de la red de franquicias, se ha establecido una inversión low cost que ronda 21.500€, para locales entre 45 y 100 metros cuadrados, en poblaciones de más de 50.000 habitantes.