Una vez finalizada la Semana Santa el Grupo Wasabi hace balance y extrae resultados positivos en los diferentes parámetros analizados en sus restaurantes.
Estableciendo una comparación con el mismo periodo vacacional de 2011, e incluso de 2010, se ha constatado la afluencia de un mayor número de clientes, una subida del ticket medio por comensal y, consecuentemente, un incremento de la facturación.
A nivel particular, estos datos vienen a confirmar la solidez y aceptación del producto Wasabi y el éxito de su fórmula, “precio realmente asequible y competitivo para una carta de extraordinaria calidad y con una extensa y cuidada selección de platos en la que el pescado no es la única opción, pero en la que se respeta el más puro estilo japonés”.
Con carácter más general, varias son las lecturas que se extraen y las realidades que se constatan. A diferencia de otras ofertas temáticas nacionales y foráneas en fase de madurez, la comida japonesa está de moda, y esto hace que a día de hoy sea un tipo de restauración menos propensa a resentirse por la incertidumbre generada por el contexto general económico. Se puede hablar, en consecuencia, de un segmento dentro de la hostelería de nuestro país que está totalmente por explotar y que tiene un amplio recorrido si al mismo tiempo se echa un vistazo a la estructura de la oferta en otros países de nuestro entorno.
En definitiva, balances como los que viene obteniendo el Grupo hostelero mallorquín y conclusiones como las anteriores también vienen a confirmar la interesante oportunidad de negocio que se presenta para todos aquellos que apuesten por la franquicia Wasabi.