La enseña ha abierto su primera franquicia en la ciudad de Denia
Tartalia, la cadena especializada en la producción de tartas de tradición artesanal, continúa creciendo a nivel nacional con la inauguración de un nuevo establecimiento en la ciudad alicantina de Denia.
La nueva tienda inaugurada el viernes pasado se sitúa en la calle Carlos Senti de la localidad en el local que ocupa el número 1 de la calle. Se trata de un espacio de 80 metros cuadrados con una gran fachada desde la que los clientes pueden observar la gran oferta de la marca. Esta franquicia ha supuesto una inversión inicial aproximada de 60.000 euros y la creación de ocho puestos de trabajo.
La enseña llega así por primera vez a la Comunidad Valenciana tras consolidar su modelo de negocio en Madrid en donde se ha convertido en todo un referente en la elaboración y comercialización diaria de tartas de forma artesanal.
Tartalia fabrica más de 45 variedades de tartas de diferentes tamaños en los que se combina sabores y recetas tradicionales con otras más innovadoras y exóticas. La elaboración de estos productos se realiza con procesos artesanales utilizando materias primas de gran calidad con la que ha conseguido una excelente relación calidad-precio. Adicionalmente comercializa otros complementos y accesorios que conforman una oferta completa para cada celebración y ocasión especial.
Además la enseña cuenta con un departamento de I+D desde el que trabaja cada día para buscar nuevos postres que contribuyan a ofrecer una alimentación sana y equilibrada que se ajusta a las necesidades de bienestar y salud de los clientes.
Tartalia nace en 1976 en Madrid de la mano de tres emprendedores quienes comenzaron a elaborar tartas artesanales a buen precio. Cuarenta años después, y tras la experiencia en la gestión de 29 unidades propias, Tartalia ha decidió dar el paso al crecimiento nacional a través del sistema de la franquicia bajo el que cuenta ya con cuatro tiendas.
De cara a los próximos años esta empresa madrileña prevé establecerse en las principales ciudades de nuestro país a través de socios franquiciados. Tartalia ofrece un modelo de negocio sencillo de gestionar respaldado por un concepto probado con éxito en establecimientos propios.
La inversión necesaria para poner en marcha un establecimiento Tartalia ronda los 32.000 euros para locales con una superficie entre 75 y 100 metros cuadrados ubicados en poblaciones con más de 40.000 habitantes.