Pizza Buona, la enseña navarra de restauración ha realizado una inversión en el desarrollo de productos para personas con intolerancias y alergias, con los que pretende diversificar su oferta y atraer a un nuevo público.
El objetivo era configurar una oferta completa que se adaptara a las necesidades de todos los clientes. Para ello se ha trabajado en ampliar la carta existente, introduciendo productos pensados para aquellos clientes con alérgenos.
Para los clientes con celiaquía, se ha introducido un menú que incluye una gran variedad de pizzas además de hamburguesas o bocadillos y complementos.
Además desde la enseña se ha elaborado un listado fácil e intuitivo que identifica todos los ingredientes que contienen los productos, de manera que los clientes con alérgenos e intolerancias puedan identificar de forma sencilla los platos puede consumir.
De igual manera, se ha facilitado la transparencia e información de los ingredientes de los productos del servicio a domicilio. En la página web, los clientes podrán identificar los productos que pueden consumir antes de realizar el pedido telefónico para la entrega a domicilio.
Desde sus inicios, la cadena ha apostado por productos de calidad elaborado con materia prima de los mejores proveedores nacionales, lo que ha resultado en una gran aceptación del público y un alto nivel de fidelidad.
Pizza Buona cuenta actualmente con tres restaurantes operativos al que se sumarán próximamente otros dos establecimientos. Bajo el modelo de la franquicia, la inversión necesaria para poner en funcionamiento un restaurante, gira en torno a 50.000 euros, en locales desde 40 metros cuadrados, ubicados en poblaciones con un mínimo de 20.000 habitantes.