La franquicia Crepería La Boheme cierra su temporada de verano con un éxito arrollador, como viene siendo ya habitual. Tras un verano cargado de nuevos clientes de dentro y fuera de la isla de Tenerife, el gerente de esta franquicia, Thierry Carayol, se plantea introducir nuevos platos con los que deleitar y sorprender a sus incondicionales en los próximos meses.
Es el caso de su primera novedad en el mes de Septiembre. Un nuevo crepe denominado “La orea”, realizado con chocolate, nata montada y las famosas galletas Orea recubriendo el dulce. Dicho crepé esté resultando todo un éxito entre sus fiel clientela. Es una muestra más de la incansable labor de su fundador por premiar de algún modo la fidelidad de sus clientes, además de introducir un componente innovador en su ya extensa carta de crepes dulces y salados.
Así pues, los candidatos a aperturar una franquicia La Boheme, encuentran en esta enseña un negocio “vivo” en constante innovación, y adaptándose siempre a los tiempos. Ofreciendo a si mismo lo mejor de este tipo de cocina a sus clientes.
Buen ambiente
Por otra parte, la crepería sigue apostando por la ambientación en sus locales. Desde hace muy poco, los clientes de La Boheme pueden, además de disfrutar de los exquisitos platos, deleitarse con la buena música que, de forma ininterrumpida, se puede escuchar en cada uno de los establecimientos. Cada local tiene su propio estilo, en función de la época del año en la que se encuentre y de la oferta de ocio que haya por sus alrededores. “Los clientes de cada local son diferentes y van buscando un ambiente concreto, por eso los estilos musicales también deben ser diferentes y adecuados a cada situación”, concluye el gerente.