Líderes políticos, empresariales y académicos de la región de Iberoamérica comparten reflexiones y opiniones sobre las distintas líneas de acción y oportunidades de futuro ante la situación inédita que atraviesa la Región debido al avance del COVID-19
CEOE
Intervinieron en el conversatorio los expresidentes de Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá y Uruguay, así como el actual presidente de Argentina, Alberto Fernández. Se inscribieron al encuentro más de 1.200 con una media de participación de más de 500.
La secretaria general Iberoamericana, Rebeca Grynspan; la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y para Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach; el vicepresidente de CEOE, Gerardo Cuerva; el rector de la Universidad Camilo José Cela, Emilio Lora-Tamayo; y la presidenta de la institución educativa SEK, Nieves Segovia inauguraron ayer un conversatorio con expresidentes iberoamericanos bajo el lema “Más Iberoamérica. Reflexiones desde la política, empresa y academia”. Intervinieron en el mismo los expresidentes de Bolivia, Carlos Mesa; de Chile, Eduardo Frei; de Colombia, Ernesto Samper; de Ecuador, Jamil Mahuad; de México, Vicente Fox; de Panamá, Arístides Royo; y de Uruguay; Luis Alberto Lacalle. Clausuró la jornada el actual presidente de Argentina, Alberto Fernández.
Líderes políticos, empresariales y académicos de la región iberoamericana compartieron reflexiones y opiniones sobre las distintas líneas de acción y oportunidades de futuro ante la situación inédita que atraviesa la Región debido al avance del COVID-19. El conversatorio, organizado por la Secretaria General Iberoamericana-SEGIB, el Consejo de Empresarios Iberoamericanos-CEIB, y la Federación Iberoamericana de Jóvenes Empresarios-FIJE, en alianza con la Universidad Camilo José Cela, se celebró en formato presencial-virtual desde la sede de la CEOE y tiene como objetivo dar respuestas, desde un punto de vista estratégico y con una perspectiva política, empresarial y académica, a las cuestiones que constituyen retos y desafíos para el futuro a medio y largo plazo de Iberoamérica.
Inauguración El vicepresidente de CEOE y presidente de CEPYME, Gerardo Cuerva, aseguró que la solidaridad y la información están siendo las mejores armas frente a esta pandemia, que ha venido a denominarse “la crisis del gran aislamiento”. Solidaridad, añadió, “desde todos los rincones y en todos los ámbitos, especialmente desde las empresas y las organizaciones empresariales, a través de proyectos e iniciativas emprendidas en la Región, como es el caso de CEOE, a través del proyecto “Empresas que ayudan”. La mejor receta tiene que ser, según Cuerva, la de apostar por una Iberoamérica más cohesionada que nunca, apoyada en pilares como la unidad, la solidaridad, la promoción del comercio intrarregional y la agenda digital, el desarrollo sostenible, la educación, la formación, la retención de talento o la colaboración público-privada. En definitiva, “para hacer más Iberoamérica, como señala nuestro lema, en el que instituciones públicas y privadas, como las que hoy nos reunimos en este acto, suman sus esfuerzos y el trabajo de sus equipos”, indicó.
En materia de colaboración público-privada, destacó el vicepresidente de CEOE, se está ante una oportunidad histórica para alcanzar acuerdos en diversas áreas y sectores, especialmente en el tema sanitario, donde el trabajo conjunto entre las empresas y la colaboración con los servicios públicos ha sido determinante. Asimismo, resaltó, los gobiernos deberían tener más presente esta realidad que atraviesan las empresas y seguir ayudando para apoyar el tejido productivo y mantener el empleo. Estos y otros temas, explicó Cuerva, se han tratado previamente en otros seminarios organizados conjuntamente por CEIB, SEGIB y FIJE, en los que se ha hablado de Pymes y Mipymes, alianzas públicos-privadas, economía naranja o innovación abierta. En referencia a este último aspecto, el representante empresarial quiso hacer hincapié en los esfuerzos que se están realizando para instaurar una cultura innovadora en las Pymes y Mipymes de la Región. Cuerva recordó que, para salir reforzados de esta crisis se requiere un trabajo de todos (gobiernos, instituciones, academia y empresas), para el que es necesario replantear estrategias a todos los niveles, en aras de que Iberoamérica alcance un alto grado de desarrollo en el aspecto económico y social, en beneficio de la Región en su conjunto.
Los representantes académicos, es decir el rector de la Universidad Camilo José Cela, Emilio Lora-Tamayo; el director del Centro Internacional de Gobierno y Marketing Político (CIGMAP) y director del Máster en Asesoramiento de Imagen y Consultoría Política de la Universidad, Jorge Francisco Santiago; y la presidenta de la institución educativa SEK, Nieves Segovia, coincidieron en que el encuentro con expresidentes iberoamericanos representa una excelente clausura de los programas académicos del CIGMAP, centro concebido como una comunidad internacional para la reflexión y el intercambio de ideas para influir en la consolidación de la política democrática, especialmente en el ámbito iberoamericano.
Academia
Nieves Segovia destacó, por su parte, el apoyo de CEOE, SEGIB y la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores para Iberoamérica y el Caribe, en la organización de este acto, que representa un excelente ejemplo de colaboración público-privada para trabajar en proyectos de interés general, poniendo la formación como prioridad para el desarrollo y el progreso social. “Los momentos excepcionales requieren respuestas excepcionales”, comentó en referencia a la pandemia, la cual ha puesto en jaque a gobiernos, sanidad, economía y educación. En este nuevo ecosistema, la educación revalida su posición como factor clave en el desarrollo humano para combatir la pobreza, la exclusión y la intolerancia, y trabajar por una sociedad más comprometida y sostenible.
El rector de la Universidad Camilo José Cela, Emilio Lora-Tamayo, a su vez, aseguró que ante la crisis tripartita es imprescindible dar respuestas claras y comprometidas desde el punto de vista político, académico y empresarial. En este sentido, el CIGMAP promueve la formación, investigación, asesoramiento, liderazgo y gestión de gobierno, a través de líderes económicos, políticos y sociales, con el fin de establecer puentes de colaboración con Iberoamérica. “Se necesitan planes de estudios universitarios y de formación profesional adaptados a la realidad de las empresas” y, en esta línea, anunció un proyecto conjunto que verá la luz en octubre sobre liderazgo global, en colaboración con CEOE, CEIB (Consejo de Empresarios Iberoamericanos), CEAJE (Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios) y FIJE (Federación Iberoamericana de Jóvenes Empresarios), con el fin de formar a los alumnos en emprendimiento económico, social, medioambiental, siempre teniendo en cuenta la tecnología, como factor para la mejora de la eficiencia.
Instituciones
La secretaria de Estado de Asuntos Exteriores para Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach, aseguró que este encuentro será, sin duda, todo un aprendizaje para salir de la crisis de una forma rápida y colaborativa, poniendo el énfasis en las alianzas público-privadas. En este sentido, destacó que la presencia de los expresidentes iberoamericanos que participan en el acto es fundamental, ya que representaron en su momento liderazgos comprometidos de gobiernos con voluntad de transformación. Los lazos tan fuertes con Iberoamérica se forjaron en aquel entonces y España está firmemente comprometida con la Región. De hecho, “nuestro gobierno será un impulsor clave en las relaciones de Europa con América Latina, gracias a los 26 acuerdos de libre comercio que mantenemos con muchos de los países de la zona”, puntualizó. Asimismo, mostró su convencimiento de que seguirán siendo fuertes aliados, ya que su relación bilateral se ha reforzado durante la pandemia gracias al diálogo permanente entre todos. Gallach subrayó que "nuestras relaciones económicas son sistémicas y la economía española, sin la ayuda de las relaciones mantenidas con Iberoamérica, sería más frágil y volátil, teniendo en cuenta que nuestro país es el segundo inversor a nivel mundial en América Latina. Por tanto, tenemos que forjar más Iberoamérica, para lograr una relación bilateral más sólida de la que ya tenemos”, declaró.
La secretaria general Iberoamericana, Rebeca Grynspan, explicó que el nuevo epicentro de la pandemia se ha trasladado a la Región, ya que, de cada dos nuevos fallecidos en el mundo, uno es de allí. Mencionó, además, que los siglos no comienzan cronológicamente y esta crisis ha marcado, sin duda alguna, el comienzo del siglo XXI. Por tanto, en su opinión, la nueva normalidad a la que la sociedad se enfrenta no debe ser sólo nueva sino mejor, solucionando los problemas estructurales que ya existían antes de la crisis. En Iberoamérica, hay menor espacio fiscal, mayor polarización social, una fuerza laboral con mucha informalidad, el crecimiento económico más bajo en los últimos siete años y una clase media todavía muy vulnerable. “El compromiso moral y ético implica ofrecer a la población las condiciones de vida necesarias para poder protegerse”, subrayó.
El Covid-19 ha intensificado las desigualdades en la Región y se aprecia, explicó, un problema de acceso a escuelas y universidades, que plantea un serio obstáculo para la formación. Según las previsiones del Banco Mundial, Iberoamérica decrecerá un 7,2% este año, se perderán en torno a 12 millones de empleos, se incrementará la pobreza en 30 millones de personas, de los cuales 16 millones en una situación extrema. “Los paquetes económicos son todavía insuficientes para poder ampliar los servicios básicos y proteger el tejido productivo. En este sentido, valoró el gran trabajo realizado por los expresidentes iberoamericanos, gracias a los programas de transferencias coordinadas y a su firme creencia en el diálogo con todos los sectores de la Región. “El corto y el largo plazo comienzan al mismo tiempo, y lo que hagamos y sembremos hoy será lo que recojamos y construyamos para mañana”, concluyó.
Reflexiones de los expresidentes Iberoamericanos Los expresidentes de Bolivia (2003-2005), Carlos Mesa; de Chile (1994-2000), Eduardo Frei; de Colombia (1994-1998), Ernesto Samper; de Ecuador (1998-2000), Jamil Mahuad; de México (2000-2006), Vicente Fox; de Panamá (1978-1982), Arístides Royo; y de Uruguay (1990-1995); Luis Alberto Lacalle, abordaron la situación actual en Iberoamérica y las previsiones, retos y oportunidades que se presentan en la fase post-Covid, para lograr que la Región salga reforzada, olvidando las ideologías y siempre mediante el diálogo y el fomento de las alianzas público-privadas.
Bolivia El presidente de Bolivia (2003-2005), Carlos Mesa, aseguró que los planteamientos antes de la pandemia ya eran complejos, y para salir de un pozo que implica pobreza, hambre, desempleo y decrecimiento, se exige ser heterodoxo y flexible en las respuestas. Mesa señaló que se debe establecer una articulación adecuada e inteligente con la comunidad internacional, marcando una línea de interlocución diferente para acelerar la transformación y adecuarse a las demandas de los países. Es imprescindible, aseguró, reformular la idea de la integración, dejar de lado las ideologías y amiguismos y establecer un respeto exclusivamente vinculado al respeto a la carta Iberoamericana y a la democrática, para lograr la construcción de espacios de mayor integración. La democracia sufre una crisis y, al seguir siendo el modelo de referencia, se debe forjar un entramado entre los gobiernos centrales, departamentales y municipales con los mecanismos de la sociedad viva, las pymes, el sector empresarial y las mujeres, para construir un espacio donde la sociedad sea protagonista y con propuestas de diálogo nacional que contemplen acuerdos en materia de empleo y lucha contra la pobreza, entre otras cuestiones. “Salir del covid desde lo tradicional es un error, se debe salir con propuestas de diálogo social real”, sentenció.
Chile El expresidente de Chile (1994-2000), Eduardo Frei, subrayó que esta pandemia ha coincidido con un desprestigio de las instituciones democráticas, de los partidos y de los estados en la Región, por lo que esta crisis en las instituciones hace que la ciudadanía sea menos partícipe y colaborativa. “Necesitamos otro enfoque, un país abierto más al mundo y más cooperativo, como es el caso de la Unión Europea y otras regiones”, explicó. Países como China, Japón o Corea están trabajando desde febrero para hacer frente a esta situación, en Latinoamérica no se está viendo esa colaboración entre los Estados. Frei aseguró que se necesita más integración para luchar contra las descalificaciones al gobierno y a los empresarios, para poder trabajar en acuerdos, crear más conexión entre lo público y privado, entre el Estado y los organismos internacionales. En definitiva, se requiere la búsqueda de iniciativas, que cuenten con una mayor confianza de la ciudadanía, ya que “juntos lo hacemos mejor”.
Colombia El expresidente de Colombia (1994-1998), Ernesto Samper, señaló que la crisis que se está viviendo es la primera en los últimos 100 años y se esperaba que fuese nuclear o de cambio climático, pero no biológica. Por tanto, explicó, la pandemia ha puesto de relieve el papel tan importante que juega la sanidad pública y la necesidad de trabajar más en investigación y desarrollo para mejorar su calidad. Hay que pensar, prosiguió, en cómo se va a financiar la post pandemia, y, para ello, hay que ir mucho más allá de las medidas tradicionales, prescindiendo de las reglas fiscales que nos condicionan, hablando de refinanciación de la deuda externa y de la reconstrucción de la economía, que representará en torno a un 10 o 12% del PIB. Asimismo, subrayó, hay que introducir el concepto de futuro, ya los jóvenes estaban pidiendo seguridad no solo física sino educacional, económica, alimentaria y ambiental; y el problema es que “el futuro ya es presente y se debe interpretar como parte de nuestra oferta en un nuevo proyecto político”. Se requiere, además, retomar el concepto de reintegración, ya que nunca habíamos estado tan desintegrados como ahora; y tenemos que pensar en el desarrollo social, medidas económicas distintas, bienes públicos, y, ante todo, en ser optimistas. “Aprendamos de estas lecciones y enseñémosle a la gente que sí tienen derechos y que hay respuestas”, declaró.
Ecuador “Me ha impactado conocer que todo lo perdido y ocurrido en el último trimestre en Latinoamérica podría equivaler a lo que ganamos en los últimos 10 años en materia económica y social y, sobre todo, que ocurra en un espacio de tiempo tan corto en relación al gran esfuerzo que costó construirlo”, mencionó el presidente de Ecuador (1998-2000), Jamil Mahuad. Por ello, es importante no volver a la normalidad de antes porque esa normalidad era el problema, sentenció. En su opinión, sería un error entrar en un nuevo territorio con los mapas del anterior, hay que crear una nueva cartografía y pensar en idear un nuevo contrato social, como ya explicó Rebeca Grynspan. Otro factor clave, añadió, consiste en aprovechar la nueva perspectiva que ofrece la tecnología para solucionar problemas y plantear opciones ante esta crisis. Mahuad quiso recordar el respeto y la cordialidad que se mostraban en las cumbres iberoamericanas y las reuniones de presidentes, y abogó por que los jefes de Estado estén por encima de sus ideologías, apoyen el diálogo e impulsen la colaboración público-privada.
México El expresidente de México (2000-2006), Vicente Fox, puso de relieve dos tendencias de debate mundial en el contexto actual: por un lado, una orientada a la globalización, el progreso, la tecnología, el desarrollo, crecimiento, empleo, acceso a alimentación, en pro de la preservación del medio ambiente y tratando de fortalecer la democracia; y, por otro, una segunda centrada en la lucha contra la globalización, que apuesta por la mala distribución de los recursos y trata de destruir lo que tanto esfuerzo ha costado construir. El mundo actual, en su opinión, tiene una vanguardia poderosa y capaz de abrirse paso en el desarrollo y en la tecnología, desarrollando nuevos modelos y avanzando en el proceso. “Esa vanguardia no puede desvincularse de la retaguardia”, explicó. "Todos tenemos derecho al desarrollo y a tratar de progresar; por ello, es muy importante dar esperanza a la gente y no abandonar ni destruir lo ya construido. La solución al futuro, subrayó, es actuar con racionalidad mediante esa vanguardia tecnológica y poder salir airosos de la crisis económica y social a la que nos enfrentamos".
Panamá El expresidente de Panamá (1978-1982), Arístides Royo, expresó su deseo de que las nuevas generaciones sean más abiertas que la suya, teniendo en cuenta que, hasta el momento, ha sido imposible lograr la unidad de los pueblos americanos. En cambio, mencionó, la Unión Europea sí ha logrado alcanzar esa unidad con idiomas totalmente distintos, procedencias tan diversas y tras haber pasado grandes crisis y largas guerras. En este sentido, destacó el trabajo de la SEGIB por Iberoamérica y aseguró que su sede se encuentra en Madrid, porque España ha sido el país que más interés ha demostrado en trabajar por y para la unidad y el desarrollo de la Región. América latina ha vivido 200 años de soledad, porque no ha sabido integrarse, explicó, y “nunca llegamos a la necesidad de tener que hacerlo, pero ahora es el momento, y espero que dicha integración tenga por lo menos la mitad de la potencia y de la fuerza europea”.
Uruguay El presidente de Uruguay (1990-1995), Luis Alberto Lacalle, destacó que la pandemia está desapareciendo en Uruguay desde la libertad responsable, sin obligación de encierro y cuarentena y con solo 30 personas contagiadas actualmente. Se han tomado las medidas apropiadas, indicó, y éstas han dado sus frutos. Sin embargo, prosiguió, es fundamental también que no se apaguen los motores de la economía, fomentando la continuidad del transporte, el consumo, la distribución y las cadenas de valor. El futuro se debe afrontar siempre con el objetivo de mantener y reforzar el desarrollo y el crecimiento económico, ya que “éste será, sin duda, el nuevo nombre de la paz, basada en la justicia social y el libre comercio”, señaló. Por último, añadió que China es el gran comprador del mundo y también de la región iberoamericana, hay que mirar siempre hacia un mundo globalizado y predicar la apertura económica y comercial, con el fin de prosperar y construir un futuro mejor para todos.
Clausura El actual presidente de Argentina, Alberto Fernández, reivindicó en su intervención la vuelta al sistema capitalista centrado en la producción, ya que el capitalismo de la especulación deja al descubierto que un virus puede destruirlo todo en 5 minutos. Cuando se trabaja por construir un mundo ambientalmente más sostenible e ir reemplazando los hidrocarburos por otras formas de energías, constató Fernández, “en los Tratados de París la respuesta siempre es negativa, ya que el PIB podría bajar el 4%, pero nos hemos dado cuenta de que un virus ha hecho que el PIB baje 9 o 10 puntos en pocos meses”. En este sentido, añadió que hay que reconsiderar el daño ambiental que se le ha hecho al mundo en décadas y la duda es si el mundo debe seguir soportando ese sufrimiento. El presidente argentino planteó, además, una falta de liderazgo total, que requiere una reestructuración del sistema para trabajar por una mayor igualdad, donde el Estado está llamado a ofrecer salud y educación y entender que “cuidar el medio ambiente es cuidar la casa que uno tiene”. Esto es lo que determinará los liderazgos del futuro, insistió, luchar por mejorar las condiciones de igualdad y de desarrollo, ofreciendo las condiciones necesarias para que todos puedan tener acceso a las oportunidades y construyendo un mundo más igualitario y equitativo. “Ahora debemos cubrir una nueva demanda social distinta a la que existía antes de la pandemia: pensar en qué mundo queremos construir después de tanto dolor sufrido”, manifestó.
A modo de conclusión, la secretaria general Iberoamericana, Rebeca Grynspan, retomó la idea del presidente de Argentina al apostar por la construcción de un mundo mejor, basado en una nueva normalidad, ya que tal y como aseguró Cristina Gallach, secretaria de Estado de Asuntos Exteriores para Iberoamérica y el Caribe, “tenemos mimbres para salir de esta crisis más reforzados que nunca y con el objetivo de construir una Región todavía más fuerte si cabe”.