LEW Brand, (Let´s Eat Well Brand), el joven grupo empresarial nacido de la experiencia y expansión de Brasayleña, ha duplicado en los diez últimos meses su facturación en el canal delivery. Esta nueva línea de negocio, representa ya el 6% del total de sus ventas, que el año pasado fueron de 19 M€.
“Para 2022, ha afirmado ha afirmado Pedro López Mena, CEO del grupo, el objetivo es superar la facturación de 24 M€, en un 30% más, algo que vemos muy factible gracias a las cifras que nos está aportando el proyecto de digitalización puesto en marcha.”.
El proyecto Delivery de LEW Brand agrupa las ventas de comida para llevar a domicilio de sus 25 restaurantes Brasayleña -la única cadena de rodizios al estilo brasileño de España y la primera de Europa-, y de sus 20 puntos de venta de Pollo Criollo, un concepto que entró en funcionamiento a través de dark Kitchens hace escasamente un año, y que ya distribuye a nivel nacional a través de agregadores.
Lew Brand cuenta además con un restaurante italiano denominado La Burratina -una trattoría pizzería 100% inspirada en la cocina napolitana- y planes muy avanzados para el lanzamiento de nuevas marcas, según ha afirmado López Mena.
El equipo de I+D de LEW Brand se encuentra desde hace más de un año inmerso en el desarrollo de nuevas marcas, todas ellas centradas en un tipo de cocina internacional, y de gran demanda por el consumidor español, así como en continuar desarrollando Brasayleña, un modelo de negocio con casi 15 años de vida, fuertemente implantado en Madrid -15 de ellos-; y con presencia en Barcelona, La Coruña, Pontevedra, Murcia y Sevilla.
Para dar cobertura a toda esta actividad, LEW Brand cuenta con una plantilla cercana a los 700 empleados, con un equipo en su central cada vez más experto en las nuevas tecnologías y en el uso de las Dark Kitchen. “Gracias a este formato de restauración a domicilio nos será más sencillo llevar nuestros productos a aquellas zonas en las que hasta por el momento no tenemos restaurantes, o donde, por motivos de distancia no podemos garantizar un adecuado traslado de los productos, mejorando además la rentabilidad de nuestra cadena”, añade López Mena.
Un salto de gigante para una cadena con casi 15 años de experiencia:
Tras casi 15 años de experiencia en el mercado, y de aperturas de restaurantes propios y franquiciados, 2021 ha sido el año de la revolución 3.0. Hace escasamente tres años, Brasayleña abordó el servicio de delivery, y en la actualidad opera con los tres gigantes del sector.
El nuevo LEW Brand ha profundizado además en la tecnologización de todos los procesos de la compañía, introduciendo nuevos sistemas de control - de gestión del stock, de las ventas, de proveedores, de gastos, facturación, etc.-, en conjunto ayudas que le llevan a ahorrar muchas horas al mes, con el consiguiente ahorro económico.
Con todo ello, el objetivo de LEW Brand es continuar ampliando su penetración en el mercado de la restauración actual, y continuar creciendo en número de marcas, y en número de clientes.
Desde su fundación en 2008, ha invertido en sus restaurantes más de 25 M€ y es propietaria del 85% de los restaurantes que operan bajo su marca.