La cadena de restaurantes asturianos mantuvo su facturación durante la emergencia sanitaria gracias a la reinvención del servicio e innovación de productos
El Embarcadero
El concepto de franquicia se ha convertido en una gran oportunidad de inversión y autoempleo. La reinvención del sector hostelero en el nuevo escenario post COVID-19 ha sido fundamental para continuar creciendo, en el caso de la franquicia La Sidrería del Embarcadero continuaron operativos a través del servicio delivery con el objetivo de dar un servicio de calidad y seguro a todos los clientes que lo demandasen.
El Embarcadero se ha mantenido firme durante la pandemia gracias a su amplia variedad de platos caseros con producto de gran calidad a precios asequibles y llamativos, a la incorporación de nuevos productos como los bollos preñados artesanales de distintas variedades, ingredientes y sabores (tartar de atún, ensaladilla rusa, carrillera ibérica al Pedro Jiménez, revuelto de morcilla con patatas paja, chorizo asturiano, chipirones encebollados, queso de cabra frito etc), y su amplia variedad de cachopos al más puro estilo asturiano; todo ello en un ambiente con un estilo que combina elegancia y tradición.
La empresa cuenta con varios establecimientos operativos y referentes en todo Madrid, como los locales madrileños de Leganés y Móstoles que abarcan una amplia zona geográfica y aseguran gran afluencia de público. Sus locales generan una experiencia diferente, ya que imitan las sidrerías típicas de la región asturiana con una oferta de productos renovada y exclusiva.
Durante el Covid han conseguido adaptarse al contexto, explotando con éxito el servicio a domicilio, convirtiéndose en referente en muy poco tiempo en las zonas donde se encuentra. Gracias al planteamiento estratégico planteado e iniciado por la enseña durante los meses de confinamiento, han conseguido consolidar sus locales y prevén nuevas aperturas a nivel nacional en poco tiempo.
Tras más de 25 años en el sector, la marca demuestra su gran capacidad de adaptación y aprendizaje constante, es por ello, que El Embarcadero se concibe como una gran oportunidad de inversión, por su concepto atractivo, económico y rentable. La enseña plantea más aperturas próximas Gracias a los buenos resultados obtenidos durante estos meses, la enseña plantea nuevas aperturas y continuar con sus planes de desarrollo en forma de franquicia de la mano de la consultora Tormo Franquicias Consulting.
Con una inversión reducida, El Embarcadero ofrece varias opciones de negocio competitivo, innovador y versátil para que el futuro franquiciado cree un negocio a medida:
- Inversores/emprendedores que deseen empezar con un negocio hostelero,
- Empresarios que cuenten con un restaurante y quieran remodelar dándole otra proyección de futuro de la mano de un formato ampliamente consolidado.
El Embarcadero posee una de las inversiones más competitivas en el mercado actual de franquicias, también goza de grandes acuerdos a nivel nacional con proveedores que permiten un margen de beneficio mayor para el franquiciado.
Se trata de un concepto ampliamente testado y un know how con muchas décadas encima que permite una fácil y óptima gestión e implementación por parte del futuro franquiciado.
Para más información de la franquicia El Embarcadero, póngase en contacto, sin compromiso, con su departamento de expansión y le facilitarán toda la información que precise.