La Pepita Burger Bar, cadena gallega especializada en burgers premium, celebra el próximo 18 de junio el día de la gastronomía sostenible en una clara apuesta por esta manera de vivir la restauración.
Y es que este tipo de gastronomía resulta clave en el apoyo a un desarrollo sostenible, gracias al interés de sus seguidores por el crecimiento agrícola, la seguridad alimentaria, la nutrición, la producción de alimentos, el consumo responsable y la protección del medioambiente, donde el tratamiento de la materia prima, desde su origen hasta que llega al plato, también es esencial.
En los últimos años, la globalización ha influido en los hábitos de consumo, afectando negativamente a los mercados de proximidad y su ecosistema, al mismo tiempo que ha dado lugar a una sobreexplotación de los recursos naturales, un consumismo descontrolado y un alto volumen de desperdicio alimentario.
Un impacto que la gastronomía sostenible pretende frenar mediante una producción equilibrada y la concienciación de una alimentación responsable, tanto fuera como dentro de casa.
Compromiso de La Pepita Burger Bar con la gastronomía sostenible Desde sus inicios La Pepita ha cuidado al máximo todos los detalles del concepto, pero especialmente la calidad de los ingredientes con los que trabaja que, sin duda, son la base de su éxito. Todos los productos que conforman la carta de La Pepita están cuidadosamente seleccionados, con procedencias locales y bajo sellos de calidad y frescura para garantizar platos excepcionales y comprometidos con el medio ambiente. Por ejemplo, las patatas fritas gruesas son caseras y cortadas a mano, y las salsas son recetas originales de La Pepita, sin conservantes ni colorantes, totalmente naturales. Respecto a su propuesta de burgers, las de ternera están elaboradas con 180 gramos de carne de vacuno rubia gallega certificada. Para las burgers de buey se utilizan los cuartos delanteros y falda de buey criado en libertad, alimentado de forma natural y con una media de edad de siete años, con el inigualable sello de calidad “El Capricho”: una garantía que ha hecho que la carne de su proveedor haya sido considerada por prestigiosos medios internacionales como una de las mejores carnes de buey del mundo.
El pan es fresco y artesano. Cada día, en cada Pepita, un panadero local sirve dos tipos de pan de masa madre. Su propuesta incluye también pan sin gluten y opciones veganas y sin lactosa, para los clientes con intolerancias y que siguen todo tipo de dietas trasladando la gastronomía sostenible y los mejores productos a todos los platos. Un compromiso que también ha extendido a su servicio take away con el uso de un packaging 100% compostable para reducir al máximo el uso de plásticos innecesarios, tan contaminantes para el medio ambiente. Por otra parte, todos los restaurantes trabajan bajo unos procesos que reducen al máximo el desperdicio de alimentos, reforzando su apoyo a un modelo gastronómico totalmente sostenible.
Más información sobre La Pepita Burger Bar: La Pepita Burger Bar tiene sus inicios en Vigo, donde abrió su primer restaurante en el año 2012, desde entonces la marca ha experimentado un fuerte desarrollo, gracias al esfuerzo de sus fundadores por diseñar un concepto de negocio en el que se han cuidado al máximo todos los detalles: producto, calidad, proveedores, formación y logística, todo con el respaldo de la tecnología y la dilatada experiencia de un consolidado equipo humano.
Actualmente está presente en nuestro país con un total de 24 establecimientos, cifra que espera continuar ampliando en base al plan de crecimiento que tiene previsto a nivel nacional.