Kumon, la mayor red de centros de enseñanza del mundo, prevé abrir en 2016 cuatro centros en Asturias, uno en Oviedo y Avilés y dos, en Gijón, para lo que ha abierto su proceso de selección de 4 profesionales con vocación educativa que quieran aprovechar una oportunidad de autoempleo óptima.
Miguel Ángel González, director regional y coordinador del proyecto de lanzamiento de Kumon en Asturias, explica que «Asturias reúne las condiciones necesarias para garantizar el futuro de nuevos centros, como, por ejemplo, el volumen de población en edad escolar y la relevancia que las familias le dan a todas aquellas ofertas educativas de calidad que repercuten en la formación integral de sus hijos».
Kumon cuenta con más de 25.000 centros en todo el mundo, donde se imparte formación a 4.400.000 alumnos. En España hay casi 240 centros repartidos en 13 comunidades autónomas, que suman más de 21.000 alumnos.
Oportunidad de autoempleo
Los profesores de los centros Kumon son quienes se ocupan directamente de las actividades docentes del centro. Gracias a los principios metodológicos en los que se fundamenta Kumon, los profesores pueden individualizar el trabajo de cualquier alumno, a partir de los 2 años de edad.
Los candidatos que deseen franquiciar con Kumon han de disponer de título universitario, ser emprendedores y tener curiosidad por seguir aprendiendo, dado que en Kumon se ofrece un intenso plan de formación y de asesoría continua destinado a que los centros educativos sean un éxito. Miguel Ángel González señala que «contamos con un equipo de profesionales volcados en esta tarea, encargados del proceso de formación, del seguimiento y del asesoramiento del franquiciado».
El canon de adhesión a la franquicia es de 400 euros + IVA y el resto de la inversión inicial varía en función de los posibles gastos de acondicionamiento del local y la puesta en marcha de la actividad: mobiliario, alquiler, permisos, entre otros. Durante los dos primeros años de funcionamiento del centro, se ofrece a los profesores una serie de subvenciones y ayudas a fondo perdido que ayudan en el inicio de la actividad como profesor o profesora Kumon. Además, contarán con el respaldo de un modelo de negocio demostrado, con el aval de una marca internacional y una amplia red de apoyo «para que el profesor franquiciado pueda tomar decisiones de negocio bien fundadas», añade González.