El delivery continúa fortaleciéndose y ganando impulso este verano. Ni si quiera los niveles de inflación registrados en los últimos meses en España han conseguido frenar las perspectivas de este negocio. Durante la primera mitad del año las empresas de reparto a domicilio volvieron a registrar cifras positivas, siguiendo con el crecimiento que el negocio lleva experimentando desde 2020 como consecuencia de la pandemia y el cambio en los hábitos de consumo.
Sin embargo, el servicio de delivery no debería ser un privilegio de las grandes ciudades. Eso es lo que pensaron en Happy City, la primera franquicia de envío de comida y otros productos a domicilio capaz de llegar a todos los rincones. Una franquicia orientada a pequeñas ciudades en las que aún no existe presencia de las grandes plataformas del sector, o si la hay, es mínima.
"Tras casi 4 años en el sector delivery nos hemos encontrado con cientos de obstáculos que hemos tenido que ir solventando y de los cuales hemos aprendido de nuestros errores para desarrollar un modelo de negocio rentable y una tecnología eficaz", afirma Rafael Bentolilla, CEO de Happy City.
"La app del pueblo"
Fundada en diciembre de 2018, Happy City se abrió paso como la primera app de envíos de comida a domicilio en Ceuta. "Nuestro modelo de expansión está enfocado en pequeñas y medianas localidades donde las grandes plataformas del sector aún no han aterrizado, o lo han hecho mínimamente y solo contando con las grandes cadenas", apuntan desde la marca. Happy City explica que esto es debido a las altas comisiones que incurren a los pequeños comercios.
"Creemos que habiendo creado un modelo de negocio rentable con personal 100% contratado por cuenta ajena, no como otras plataformas, hemos demostrado una gran gestión respetando los derechos de los trabajadores" declara Rafael. Y añade, "nuestro modelo nos permite llegar a esas pequeñas poblaciones donde otras plataformas no llegan por diversos motivos, como escasa profundidad de mercado o carencia de riders autónomos".
En la actualidad, Happy City se ha convertido en líder del sector en Ceuta. "Nos gusta definirnos como la 'app del pueblo'. Ofrecemos un concepto probado y rentable, con negocios e inversores bien atendidos, comisiones razonables, consumidores satisfechos, atención personalizada y recepción de todo tipo de productos a domicilio, imposibles hasta ahora".
Emprender en un sector en constante crecimiento
Happy City ha comenzado su expansión para llevar su concepto por todo el territorio nacional, acercando el mundo del Food Delivery a aquellas ciudades donde otros no pueden llegar. "Buscamos franquiciar el negocio del Food Delivery porque el crecimiento del sector es notable y lo seguirá siendo durante los próximos años", asegura Rafael Bentolilla.
Altas perspectivas de crecimiento para los próximos años, la tendencia al alza de la compra online o la necesidad de los pequeños negocios a digitalizar su carta son algunos de los motivos que garantizan la viabilidad de este concepto. Para su expansión, buscan un perfil emprendedor o inversor con experiencia comercial que desee poner en marcha su propio negocio. Para ello, la enseña ofrece diferentes modelos con una inversión a partir de los 6.000€.
En las próximas semanas abrirán su primera franquicia en la provincia de Málaga. "Marbella abrirá en dos semanas y no podríamos estar más ilusionados, ya que es la primera. Estamos muy ilusionados, tenemos altas expectativas en el franquiciado gracias a su experiencia en el mundo "food delivery". Con Happy City van a dar un salto cualitativo a su servicio, van a poder acceder a miles de nuevos clientes potenciales y pronto todos los restaurantes de la zona estarán llamando a sus puertas", declara Rafael Bentolilla, CEO de Happy City. Y añade, "han hecho un gran trabajo seleccionando buenos y reconocidos partners (restaurantes) locales; y formando a todo su personal en la app para que el trabajo vaya rodado desde el primer día".