El Ministerio publicó el pasado 1 de marzo la lista de las consideradas "pseudociencias", y de las que aún están pendientes de revisión, para saber si caen dentro de las consideradas científicas o no. En ninguna de ellas aparece la Psicología Positiva. Es decir, el propio Ministerio reconoce a ésta como una disciplina científica dentro de ésta actividad
La Psicología Positiva ha estado siendo muy atacada desde ciertos ámbitos ajenos a la Psicología, pero también desde dentro de la propia disciplina. Lo cierto es que el Ministerio publicó el pasado 1 de marzo la lista de las consideradas "pseudociencias", y de las que aún están pendientes de revisión para saber si caen dentro de las consideradas científicas o no. En ninguna de ellas aparece la Psicología Positiva.
Los ministros, María Luisa Carcedo y Pedro Duque, explicaron que el trabajo que se ha hecho hasta ahora ha sido comprobar en la literatura científica si existen estudios publicados que avalen la utilidad de estas prácticas y productos. Para ello se ha usado la web PubMed, que recoge toda la producción científica, revisando lo publicado desde 2012 a 2018. Éste trabajo ha arrojado dos listas: 73 técnicas o productos que pasan directamente a denominarse “pseudociencia” y otras 66 que están examinando. “En ninguna de ellas aparece la Psicología Positiva. No entendemos muy bien en qué se han basado, propios y ajenos, para ello (envidias, promocionar sus propios enfoques...), pero así ha sido. Se nos ha tachado de pseudociencia para tratar de eliminarnos del ejercicio profesional” explica Rosana Pereira, fundadora, junto con su hermana Mónica, de Haztúa Psicología Positiva, Sociedad Limitada Profesional colegiada en el Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid (España) con el Número SPM-0045.
En este mismo sentido se ha pronunciado Gonzalo Hervás, Presidente de la Sociedad Española de Psicología Positiva (SEPP), en su cuenta de twitter: "La psicología positiva emplea los mismos métodos que el resto de la psicología. Usa el método científico, estudios de laboratorio, ensayos clínicos aleatorizados, medidas válidas psicométricamente, etc. Esto no quiere decir que sirva para todo, ni que esté todo estudiado. Y esto deja en evidencia a quienes, desde dentro de la psicología, tratan de usar instrumentalmente el movimiento escéptico para sus propios fines, como por ejemplo, promover sus terapias y sus modelos tratando de desacreditar a las demás. Y por último, recalcar una vez más que la psicología positiva está en contra del pensamiento positivo, está en contra de la dictadura de la felicidad y está a favor de vivir de forma natural tanto las emociones agradables como las desagradables”. La Psicología Positiva representa una innovación dentro de la Psicología. No es una perspectiva nueva; el bienestar y la felicidad han sido campos de estudio y reflexión desde Platón. La sociedad actual se basa en el concepto de estado de bienestar y las organizaciones e instituciones se hacen eco, entre ellas la OMS, que define la salud como “un estado de bienestar físico, mental, y social completo, y no sólo la ausencia de enfermedad e incapacidad, sino un estado positivo que concierne al individuo en sí mismo en el contexto de su vida" (Organización Mundial de la Salud, OMS, 1946).
Hasta hoy los esfuerzos de los profesionales e investigadores se habían centrado casi exclusivamente en reducir o eliminar todo aquello que generaba malestar, gracias a los avances en las ciencias de la salud se ha observado que este modelo es mucho más eficaz cuando se complementa con estrategias que trabajen la optimización de los recursos, de las fortalezas que todas las personas tienen presentes. “Esta línea de intervención es fundamentalmente preventiva; dota al individuo de estrategias que le permiten manejar de forma eficaz los retos de la vida diaria contribuyendo así a la percepción de autoeficacia (confianza en las propias capacidades) y a una visión optimista del entorno y uno mismo. La Psicología Positiva supone una herramienta muy útil para el crecimiento personal porque aporta cientificidad y focaliza en los recursos, en el potencial que cada persona tiene para conseguir sus metas”, explica Mónica Pereira.
Haztúa Psicología Positiva S.L.P, Sociedad Limitada Profesional colegiada en el Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid (España) con el Número: SPM-0045, es una cadena de centros de atención psicológica y formación, con el objetivo de ofrecer una atención clínica excelente y un servicio de atención al cliente de primera clase a individuos, parejas y familias. “Si eres un terapeuta establecido, y entiendes la dificultad de dirigir un negocio de psicología y cuidar a los clientes al mismo tiempo, o tu sueño es establecerte por tu cuenta como psicólogo, “Haztúa Psicología Positiva te permite montar tu propio gabinete de psicología por algo más de 20.000 euros y rentabilízalo el primer año. Una práctica de psicoterapia colaborativa que ofrece soporte de marketing para ayudarte a obtener clientes y fidelizarlos, un modelo de ayuda que hará que tu práctica sea más divertida, más rentable y ofrezca mejores cuidados para tus clientes”, finaliza Rosana.
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Haztúa concibe los servicios de psicología en una nueva era; sus prácticas de éxito aprovechan la tecnología, se centran en el servicio al cliente y ofrecen experiencias y resultados positivos. Los franquiciados de HAZTÚA se benefician de las bases ganadoras que hemos establecido: 1) Un modelo de negocio probado y exitoso. 2) Formación continua y apoyo empresarial a nuestros franquiciados. 3) Soporte operativo incluyendo recepción y programación de citas, acreditación y facturación. 3) Mensaje de marca fuerte, reconocimiento de marca y presencia en medios online y offline.
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