Los pequeños han elaborado con todo su cariño sus propios regalos, como un marco de fotos y un coche donde han colocado una imagen suya. La Red de Escuelas Infantiles Nemomarlin ha engalanado sus clases para celebrar una de las fechas más importantes del año: el Día del Padre, el próximo 19 de marzo. De este modo, una cartulina de color celeste presidirá la entrada de las clases donde se recogerá una bonita poesía dedicada a los papás. Además, y debido a la importancia que tiene para la inteligencia emocional de los niños expresar el cariño que profesan a sus padres, cada alumno ha realizado con todo su afecto un presente para sus progenitores a lo largo de la última semana. Sonia Brenes, Directora de Nemomarlin Las Rozas, afirma que “para los niños es un orgullo poder hacer un regalo elaborado principalmente por ellos para sus queridos papás. Se trabaja ese vínculo tan especial que les une; es una manera diferente de decirles que les quieren y que son ‘sus héroes’”. La sorpresa para los padres comenzará desde que tengan en sus manos los regalos porque el envoltorio, elaborado con papel de seda y precintado con papel celofán decorado con estrellitas plateadas, contiene algo muy especial que los niños les han dedicado pensando solo en ellos: una poesía.
En esta ocasión, dependiendo de la franja de edad en la que se encuentre el alumno, el obsequio será diferente. Así, en las aulas de los niños de 0 a 1 año, se elaborará un coche con la foto del pequeño en goma-eva y con unos faros sobre los que sellarán la huella del pie. Además, detrás se incorporará un imán para que pueda adornar la nevera de casa, y un detalle que no puede faltar: en la matrícula estará adherida una pegatina con la frase “te quiero papá”.
Por otra parte, las clases de 1 a 2 años han optado por realizar un marco de fotos que mostrará una foto del niño con su padre. La originalidad es uno de los valores más reseñables de este presente, que alrededor llevará plasmadas las huellas de los pies de los niños. Y, finalmente, los más mayores de Nemomarlin confeccionarán el mismo automóvil que los alumnos más pequeños, pero con técnicas plásticas diferentes. “Cuando ven en casa estas manualidades que ellos han realizado en las aulas, les motiva a hablar de la escuela y de lo que hacen en ella”, comenta Sonia Brenes.
Padre solo hay uno y se lo merecen todo, así que los pequeños se han desvivido por el obsequio que entregarán a su padre, ya que su mejor recompensa es ver la sonrisa de sus progenitores reflejada en su rostro. Una sonrisa que compartirán a lo largo de todo el día gracias al granito de arena que Nemomarlin ha puesto en cada presente para reforzar los lazos de unión entre padre e hijo. Y es que gracias a este tipo de actividades se consigue, entre otros, que “los niños valoren más a sus papás, expresen sus sentimientos de una forma diferente, comprendan otras formas de comunicación, fortalezcan lazos de unión y desarrollen la sensibilidad”, finaliza la Directora de Nemomarlin Las Rozas.