La academia de robótica educativa Edukative ha cerrado el año con un aumento de la facturación del 100 % respecto a 2014. Para este año, la compañía tiene previsto expandir su negocio a nivel nacional y doblar los resultados económicos obtenidos en 2015.
La facturación de la enseña ha sido de 180.000 euros gracias al crecimiento que ha experimentado a través de las clases que imparten, tanto en la propia academia como en distintas escuelas de Barcelona como actividad extraescolar, superando así las expectativas previstas para 2015. Este año, Edukative iniciará nuevos proyectos que le permitirá aumentar sus beneficios y llegar a duplicar la facturación hasta conseguir los 360.000 euros, uno de los objetivos de crecimiento que se ha marcado junto a la puesta en marcha de un nuevo modelo de negocio y la apertura de su segundo centro que espera abrir durante el año 2016 en la provincia de Barcelona. Este segundo centro propio se abrirá debido a la gran demanda de plazas que tenemos. Para poder dar servicio a personas que vienen de otros barrios de la ciudad, hemos pensado abrir otro centro en otro barrio, de forma que acerquemos la actividad a más personas que la demandan.
En palabras de José Cabrera, cofundador de Edukative: “el pasado año 2015 ha sido muy bueno en cuanto a crecimiento y consolidación de nuestro proyecto. Hemos crecido, hemos mejorado muchos aspectos relacionados con la calidad que damos a nuestros clientes. Durante el 2016 seguiremos en esta misma línea, mejorando procesos que redunden en una mejor atención a nuestros alumnos”. Tras un año y medio desde el inicio de las actividades la academia tiene el centro lleno de clientes, incluso con lista de espera. La iniciativa ha tenido una gran aceptación por parte de padres y alumnos y, tal y como indica Cabrera, “el secreto del éxito está en que la actividad es, al mismo tiempo, educativa y lúdica. Los padres saben que sus hijos están aprendiendo y los hijos disfrutan con la robótica”.
En septiembre de 2014 pusieron en marcha la iniciativa mediante inversión propia de sus fundadores, José Cabrera y M.Carmen García, para la creación de su primer centro en Barcelona. A día de hoy cuentan con alrededor de 300 alumnos a los que hay que sumar los de las escuelas en las que también imparten sus clases, tres en la actualidad con expectativas de entrar en otras 5 en los próximos meses. También han trabajado para compañías como Everis, Barcelona Activa o Caixa Bank, entre otras.
Las clases de robótica educativa se dirigen a niños de entre 3 y 16 años para que puedan empezar a prepararse para su futuro laboral con la robótica y el inglés, potenciando el talento y las habilidades de los jóvenes.