Las entregas colaborativas continúan convirtiéndose en una tendencia al alza, según los últimos datos de Shopopop, startup pionera en este modelo de envío a domicilio. Así, la compañía anuncia que ya ha logrado realizar más de 10 millones de entregas en Europa gracias a su innovadora fórmula.
Shopopop se ha convertido en un referente de la economía colaborativa, junto a otras plataformas como Blablacar y Wallapop, cuyo objetivo es aprovechar las nuevas tecnologías para conectar personas y construir comunidades que se ayuden entre sí. De esta manera, la propuesta de Shopopop es conectar comercios con conductores particulares que puedan aprovechar sus trayectos habituales para entregar paquetes a cambio de una propina. Estos usuarios pueden llegar a conseguir unos ingresos extra de entre 1.500 y 2.800 euros al año.
En España, Shopopop ya ha puesto en marcha su servicio en Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao. Además, según señalan desde la compañía, ya han iniciado pruebas en dos nuevas ciudades y próximamente se anunciará el lanzamiento de la plataforma en otras dos más. Clara Lloveres, Country Manager de Shopopop en España, señala: "Estamos muy felices de alcanzar un hito tan importante como es llegar a los 10 millones de entregas. Además, vemos una gran oportunidad en España, ya que es un mercado que encaja perfectamente con nuestra visión de crear comunidades, aprovechar los recursos y generar espacios más sostenibles".
En toda Europa, Shopopop cuenta con más de 10.000 negocios que utilizan este método de envíos a domicilio. Además, ya son más de medio millón los usuarios que han realizado al menos una entrega. Desde su nacimiento en Francia en 2016, la compañía ha seguido una estrategia de expansión continua que le ha permitido hoy estar presente en Francia, Italia, Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo y España.
Además del beneficio económico que puede suponer para los conductores habituales, los comercios también encuentran en esta fórmula un aliado para su negocio. A través de Shopopop tienen una forma de digitalizar sus servicios incluyendo entrega a domicilio sin la necesidad de contar con una gran infraestructura y pueden ofrecer a sus clientes una mayor rapidez y flexibilidad a la hora de escoger franjas de entrega.
Por último, desde la compañía señalan que, gracias a las entregas colaborativas, los comercios están logrando generar casi cuatro veces menos CO2 a la semana, en comparación con la contaminación que hubiesen supuesto otras opciones como las rutas de servicios de entregas o los desplazamientos de los propios clientes al comercio.